Este proyecto de investigación permitirá ofrecer una alternativa más sostenible al curtido de piel, proceso vital en la citada industria y que actualmente provoca una gran cantidad de residuos y otras problemáticas para el medio ambiente
El departamento de Calidad y Medio Ambiente del Centro Tecnológico del Calzado de La Rioja, CTCR, está desarrollando un proyecto de I+D+i, basado en biotecnología, cuya meta final es reemplazar el cuero, utilizado en la fabricación de calzado y asociado a graves problemas ambientales, por material biológico (celulosa bacteriana), no tóxico y biodegradable.
La celulosa es un biopolímero que se encuentra de forma natural en las plantas, pero que también se puede obtener a través de un proceso biosintético en las bacterias. Al respecto, las investigaciones efectuadas en celulosa bacteriana confirman que posee mejores propiedades físico-químicas como son mayor resistencia mecánica, alta cristalinidad y alta pureza, frente a la obtenida de forma natural de las plantas. Estas conclusiones se derivan del minucioso estudio realizado por el CTCR, centrado en buscar y seleccionar las condiciones más óptimas para el crecimiento de los microorganismos productores del biomaterial. Concretamente, los resultados obtenidos permiten validar su uso como material para el calzado y su posible producción a nivel industrial, demostrando que es posible producir tejidos a partir de bacterias, aunque todavía es necesario seguir avanzando para mejorar su capacidad de permeabilidad al vapor de agua, fundamental para su uso como material de empeine en calzado.
Este es precisamente el obstáculo principal en el que ahora se centra el CTCR, en el marco de este innovador proyecto, cuya labor de investigación se basa en analizar las tecnologías disponibles para otorgar al biomaterial propiedades impermeabilizantes, y que éstas sean de origen natural, para poder conseguir una materia totalmente resistente al agua, que no interfiera en sus propiedades mecánicas. Los ensayos al respecto aportarán la información necesaria para validar y aplicar el nuevo biomaterial en el sector calzado, conforme a los requisitos que establece la normativa.
En consecuencia, la comercialización de este tejido vegetal como sustituyo del cuero, solventará la problemática ambiental detectada por los fabricantes, como por ejemplo el empleo de elevadas cantidades de productos químicos, el gran consumo de agua y la generación de aguas residuales con contaminantes, la imposibilidad de utilizar los restos de pieles como valorización energética, etc.
Como conclusión, el CTCR trabaja inmerso en esta línea de investigación, con resultados óptimos, donde se prima la calidad de los tejidos empleados en la industria zapatera, así como, nuestra salud y el cuidado del Medio Ambiente.
Celulosa purificada original y sin teñir Celulosa purificada tras el proceso de teñido
ACCEDE A LA INFOGRAFÍA DETALLADA DEL PROCESO DE I+D+i
