El Centro Tecnológico del Calzado de La Rioja, CTCR, ha viajado esta semana hasta la localidad neerlandesa de Waalwijk para participar en las jornadas SLEMinars, celebradas en el instituto del calzado SLEM durante los días 20 y 21 de abril. En esta edición la temática del evento gira en torno al futuro de la producción de calzado, las nuevas tecnologías aplicadas y los cambios que están llegando al sector.
Durante la primera jornada de los seminarios se ha puesto de relieve el avance que suponen las nuevas tecnologías en la producción inteligente de calzado. Por un lado, la combinación de escáneres 3D e impresión 3D permiten ofrecer calzado personalizado y adaptado a las necesidades y gustos de cada cliente. Por otro lado, las tecnologías de la industria 4.0 (big data, robots colaborativos, sistemas ciberfísicos, internet de las cosas, etc.) optimizan los procesos de fabricación, consiguiendo mejorar los resultados, optimizando el uso de recursos y, a pesar de lo que se pueda pensar, aumentando la importancia que tienen los trabajadores, ya que pasan a desempeñar tareas que aportan mayor valor añadido al producto, mientras los robots son los encargados de realizar operaciones de menor importancia.
La segunda jornada de los SLEMinars versa sobre la producción disruptiva de calzado, es decir, los cambios bruscos que están llegando a los procesos productivos del sector y que pueden cambiar su historia para siempre. Diversos ponentes internacionales exponen en esta jornada su experiencia en lo referente a la producción en serie de calzado a través de fabricación aditiva (impresión 3D), el uso de nuevos materiales, los tejidos 3D aplicados al calzado y la producción o finalización del calzado en las propias tiendas de cara al consumidor.
Una conclusión común a todas las conferencias es que sin inversión en I+D+i en los productos y en los procesos productivos es imposible competir en el mercado global, más aún si se tiene en cuenta la potencia productiva de países con mano de obra de bajo coste. Esto hace que la labor del CTCR cobre cada día mayor importancia, teniendo como objetivo final el aumento de la competitividad empresarial a través de la mejora de procesos (RFID, impresión 3D, TICs…), el desarrollo de nuevos materiales y el cuidado de los aspectos medioambientales y la sostenibilidad, entre otros.